La invención del Karaoke

 

Uno de los inventos más populares de las últimas décadas es el Karaoke, un aparato que nos permite cantar nuestras canciones favoritas y sentirnos como estrellas de la música, además de convertir en una pesadilla la vida de los vecinos. Bromas aparte, este entretenimiento tuvo una aceptación y un éxito que su creador jamás llegó a imaginar, siendo utilizado también para el aprendizaje de idiomas e incluso como terapia contra la depresión.

El karaoke fue inventado en el año 1971 por Daisuke Inoue cuando un empresario amigo suyo le invitó a viajar con él en un viaje de negocios. Inoue no pudo aceptar la invitación de su amigo, pero en agradecimiento le grabó una cinta de música. Un acto aparentemente tan normal le dio la idea de grabar más cintas y distribuirlas por cafeterías y bares de la ciudad de Kobe (Japón), pero necesitaría un soporte, un aparato, así que en tres años tuvo listo su primer prototipo.

Este aparato tenía varias cintas de música variada (sin voz) interpretadas por Inoue y su grupo, e incluía un reproductor, un amplificador y un micrófono, para que cualquiera que se animase pudiera interpretarla. Su intención era alquilar su aparato al menos a 20 establecimientos, para poder vivir de sus alquileres mientras dedicaba el tiempo a su gran pasión, tocar con su grupo. El rápido desarrollo del karaoke se debió a la falta de patente, que permitió la creación y modificación del invento por parte de cualquiera. Tardaría algún tiempo que los karaokes incluyesen la pantalla en la que se muestra la letra de la canción, tan familiar para nosotros hoy en día, pero impensables en los años 70.

Curiosamente su inventor se mantuvo prácticamente en el anonimato hasta 1996, quince años después de haber desarrollado su idea, y debido a que no registró la patente en su día ha dejado de percibir por su invento cerca de 185 millones de euros, lo cual no le impide sentirse orgulloso de su invento. Igual sucede con todos sus inventos posteriores, y el propio Inoue ha aclarado que a él sólo le gusta inventar, y que si otros quieres beneficiarse de sus inventos son libres de hacerlo. Entre estos inventos encontramos detergentes ecológicos o repelentes para cucarachas específicos para los karaokes, ya que según Inoue son estos insectos los responsables de un 80% de sus averías.