Qué es el karma

 

Debido a la globalización cada vez son más las personas que dicen creer en el karma. Esta palabra sánscrita procede de las creencias del budismo, el hinduismo, el yainismo y el ayyavazhi. Su significado etimológico es "acción", sin embargo la palabra en sí contiene una inmensa teoría filosófica que defiende la libertad humana.

Definición básica del karma

Para saber qué es el karma lo primero que debes entender es que no se trata de algo físico o palpable, al contrario: es considerado como una ley cósmica de causa y efecto. Es decir, cada acto que comete una persona conlleva una consecuencia concreta.

Por lo tanto, el karma viene a decir que si cometes actos negativos él se encargará de que tengas consecuencias negativas durante el transcurso de tu vida; y si cometes actos positivos, recogerás experiencias positivas.

Si aplicamos esta concepción en la vida de las personas nos damos cuenta de que el karma defiende que el ser humano es el responsable de sus propios actos, por lo tanto, nosotros somos quiénes debemos elegir hacer el bien o hacer el mal y, en función a nuestra decisión, tendremos unas consecuencias u otras.

En la definición sobre qué es el karma no hay espacio para la injusticia puesto que no existe: es el propio hombre quién decide con sus actos cómo será su vida. A diferencia de culturas como la cristiana, la judía o la musulmana, en la teoría del karma no hay ningún ser superior que juzgue tu conducta puesto que la justicia está en tus propias manos.

Los tipos de karma

La definición del karma se basa en las acciones que cometemos los seres humanos; sin embargo, estas acciones no siempre son acciones materiales o físicas. Cualquier acción cometida por una persona, sea o no física, tiene su consecuencia según la definición de qué es el karma.

Existen 3 tipos de acciones que influyen en el karma:

• Acciones físicas: son aquellas acciones que cometes físicamente, por ejemplo, robar, agredir a alguien, etcétera

• Acciones verbales: son aquellas acciones que dices verbalmente, por ejemplo insultar o maldecir a alguien

• Acciones mentales: el karma también tiene en consideración nuestros pensamientos, pues forman parte de nuestro individuo.

Qué puedes hacer para equilibrar tu karma

Según las filosofías orientales como la budista o la hindú, los seres humanos podemos realizar una serie de acciones durante nuestras vidas que ayudarán a equilibrar la energía kármica y conseguir, así, que recojamos efectos positivos.

Un ejemplo muy visual que sirve para entender qué es el karma es imaginarnos un campo en el que nosotros sembramos semillas; si las semillas son buenas, recogeremos una buena cosecha, si son malas, recogeremos una mala cosecha.

Para llenar nuestro campo con semillas buenas podemos llevar a cabo estas acciones:

• Hacer de cada acto negativo, uno positivo: si has tenido un mal día y, por ejemplo, has gritado a un familiar, al día siguiente regálale unas flores y pídele disculpas

• Aprender a perdonar: todo el mundo puede equivocarse y tener un mal día; para pretender que los demás te perdonen a ti lo primero que debes hacer es aprender a perdonar a los demás

• Haz ejercicios de relajación espiritual que promuevan tu energía positiva. Los ejercicios que se recomiendan son meditaciones o ejercicios de yoga(uncomo.com)

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