¿Quién inventó la Ruleta?

 

En la actualidad no existe un consenso sobre dónde fue inventada o quién fue el creador de la ruleta: mientras que algunos opinan que su origen está en las frías cumbres del Tíbet, otros sitúan este punto en las cálidas costas del Mediterráneo, en la eterna Roma y otros lo asocian a un antiquísimo juego de China. Otro grupo, incluso, atribuye su invención al insigne matemático Blaise Pascal (1663-1622) asegurando que la ruleta surgió por casualidad mientras Pascal trataba de perfeccionar su utópica máquina de movimiento perpetuo.

Hablamos claro está de la idea primigenia, ya que la actual ruleta giratoria proviene del año 1765, concretamente de la ciudad de París, pero tras la Revolución Francesa los juegos de azar fueron prohibidos, quedando temporalmente en el olvido. Con el gobierno de Napoleón se volvieron a permitir los juegos, pero esta tregua apenas duró hasta 1839, cuando se volvieron a prohibir.

La ruleta de 37 números y un «O» fue inventada en 1842 por los hermanos François y Louis Blanc, de origen francés y fue tal su éxito que les permitió fundar uno de los primeros casinos que tuvo Montecarlo. En pocos años el invento se hizo tremendamente popular entre las élites de Francia e Inglaterra, llegando al continente americano en la segunda mitad del siglo XIX, donde también captó la atención de las clases altas y pudientes.

En cuanto a las variantes de la ruleta tenemos la llamada «boule«, que se juega con una ruleta estática, donde se hace rodar la bola por los bordes de una especie de cuenco. También está la ruleta americana (curiosamente nacida en Francia) de 31 números, en la que se añade una casilla con un doble cero y que tiene un mayor riesgo para el jugador, ya que aumenta las posibilidades de que que gane la banca. La ruleta normal de un sólo «O» es llamada «la francesa».