No quiere envejecer pues tenga un cerebro joven.....como....?

Llegada un determinada edad de nuestra vida debemos ser sumamente concientes de que elcuerpo empieza a presentar complicaciones, pero más importante aún es que esas complicaciones no lleguen a nuestro cerebro.

Es por eso que salir a dar caminatas, distenderse, como realizar alguna que otra actividad cardiovascular, ayuda a mejorar la memoria en personas adultas, mayores a los 55 años de edad, y a su vez, se impide el deterioro de las capacidades mentales que se vinculan al envejecimiento.

Las conclusiones del parrafo anterior no han salido de la galera de algún mago, sino que han llegado a estas profesionales que realzaron el primer estudio  sobre adultos con buena salud de más de 55 años, en el cual se exponen síntomas de atrofia en el hipocampo, la región del cerebro que desempeña un rol primordial en la memoria.

Para esta investigación de formaron unidades de estudios de científicos pertenecientes a las Universidades de Pittsburgh, Illinois y Rice, todas ubicadas geográficamente en los Estados Unidos. Se convocaron a 120 personas de entre 55 y 80 años de edad, con características sedentarias y sin señales de demencia. El 50% de estas personas tuvo que estar sometida a un programa de marcha moderada durante 40 minutos tres días por semana, mientras el resto del grupo hizo sólo ejercicios de estiramiento.

En los exámenes finales se constantó que luego de un año, los participantes que realizaron la rutina de caminar reflejaron un aumento en sus hipocampos izquierdo y derecho de 2,12 y 1,19% respectivamente. En cambio, los miembros del otro grupo expusieron una disminución de 1,40 y 1,43% en las mismas regiones cerebrales, es decir, el desgasto común y corriente debido al envejecimiento, que afecta en la zona de la  memoria y acelera los riesgos de demencia.