¿Por qué los humanos seguimos teniendo vello púbico y axilar?

A través de la evolución, los humanos hemos ido modificando nuestra apariencia, deshaciéndonos de rasgos que antes tenían un rol y hoy ya no son necesario, aunque algunos quedaron y hoy se conocen como órganos vestigiales. Existe una gran discusión acerca de si el vello aún tiene una función o es una característica evolutiva que queda aún en el cuerpo humano. Hoy vamos a contarles por qué las personas aún tenemos vello púbico y axilar.

Por qué tenemos vello público

Por más que mucha gente se lo rasure, depile con cera o láser, el vello público no está para molestarnos, sino que cumple diversas funciones. En el acto sexual, el vello púbico cumple el rol de evitar la fricción entre la piel del hombre y la mujer. Si ambos no lo tienen, podrían sufrir heridas o quedar con marcas luego del rose.

En las mujeres, el vello público también tiene otra función importante: defender a los órganos sexuales de infecciones, actuando como una primera barrera, ya sea para bacterias y otros patógenos. Una teoría que da vueltas, pero tiene poco asidero, es que el vello publico, en el caso de ambos sexos, se encargaría de mantener los órganos sexuales a la temperatura adecuada, lo que sería especialmente importante en los hombres.

Este razonamiento no tendría el suficiente sentido, ya que en la zona más importante a proteger, los testículos, el vello corporal no es mucho.

Por qué tenemos vello axilar

La mayoría de las mujeres nos deshacemos del vello axilar, sobre todo en verano, pero éste también tiene un rol, aunque menos importante. Se cree que el vello axilar, tanto en hombre como mujeres, ayuda a retener el olor corporal y hacerlo más fuerte, gracias a las bacterias que se esconden en él.

Con un olor corporal más fuerte, estaríamos atrayendo a potenciales parejas, algo que puede haber tenido sentido en el pasado, pero que hoy más que nada hace que el resto nos rehuya si no contamos con la suficiente higiene.

La teoría anterior toma fuerza en el momento en que aparece el vello axilar y púbico, que es durante la pubertad, periodo en las glándulas sudoríparas tienen mayor actividad, haciendo saber al sexo opuesto de que el o la joven ya son fértiles. 

Se cree que dos personas con olor corporal diferente, se sentirán más atraídas entre si que quienes tienen aromas similares. Con eso, se evitaría que un hombre y mujer emparentados procreen, disminuyendo la posibilidad de pasar defectos genéticos de una generación a otra.

Podemos concluir que el vello público cumple un rol importante y que, unido a una buena higiene nos protege, mientras que aquellos pelos que se encuentran en las axilas, hoy son vestigios de una época en la que cumplían un rol.